sábado, 29 de agosto de 2009

La Escala de Bristol


Supongo que para muchos, de igual forma que me ocurrió a mí, esta escala es totalmente desconocida, pero creo que tan sólo por el nombre merecía ser comentada aquí. Hay que decir que es su auténtico nombre, aunque parezca mucha casualidad, dado el nombre del blog. Si se piensa bien, es como si la providencia la hubiera creado para que aparezca aqui...

Hagamos una pequeña introducción porque la cosa tiene miga (bueno, miga y más cosas mezcladas). La escala de Bristol no es otra cosa que una escala para catalogar mierdas. Sí, habéis leído bien, mierdas... troncos, heces, cacas, zurullos, truños, ñordos, zurraspas, zoretes, boñigas, cagadas, excrementos, deyecciones, defecaciones, chocotrozos, deposiciones, majás, plastas, detritos, chorongos, cagarros, mojones, descomidas, y un largo etcétera. Si los terremotos tienen la suya, porque no la van a tener los mojones, pobrecitos…